“Dando voz a quienes necesitan ser escuchados”, es el lema desde quienes trabajan con niños que padecen esta patología.
Hoy, 30 de septiembre, se celebra el Día Internacional del Trastorno Específico del Lenguaje (TEL). Esta fecha sirve como un recordatorio para visibilizar las dificultades que enfrentan millones de personas en todo el mundo que experimentan este trastorno del desarrollo del lenguaje.
El TEL se caracteriza por dificultades significativas en la adquisición y el uso de la lengua, afectando la comprensión, la expresión oral y escrita. A pesar de ser una condición común, a menudo es subdiagnosticada o mal entendida.
¿Qué implica el TEL?
Dificultades en la comprensión: Problemas para entender lo que otros dicen, seguir instrucciones o captar el significado de palabras y frases complejas.
Dificultades en la expresión: Problemas para formar oraciones coherentes, encontrar las palabras adecuadas o expresarse con claridad.
Impacto en la vida diaria: El TEL puede afectar el rendimiento académico, las relaciones sociales y la autoestima de quienes lo padecen.
¿Por qué es importante visibilizar el TEL?
Concientización: Dar a conocer el TEL es el primer paso para romper estigmas y brindar el apoyo necesario a las personas afectadas.
Diagnóstico temprano: Detectar el TEL a tiempo permite iniciar intervenciones terapéuticas que pueden mejorar significativamente la calidad de vida de los niños y adultos.
Inclusión: Crear entornos educativos y sociales más inclusivos donde todos puedan participar plenamente.
¿Qué podemos hacer?
Informarnos: Aprender más sobre el TEL para reconocer sus signos y síntomas.
Buscar ayuda: Si sospechamos que un niño o adulto podría tener TEL, es fundamental consultar a un profesional de la salud.
Apoyar la investigación: Fomentar la investigación científica para desarrollar nuevas herramientas de diagnóstico y tratamiento.
Promover la inclusión: Trabajar juntos para crear una sociedad más justa y equitativa para todas las personas.
En este día, celebramos los avances logrados en la comprensión y el tratamiento del TEL, pero también reconocemos que aún queda mucho por hacer. Al unir fuerzas, podemos construir un futuro más brillante para las personas que viven con este trastorno.
Esta información ha sido compartida por la ONG “Hilos de Esperanza” de General Pinedo.